ARGENTINA.- Próximamente, el Gobierno nacional enviará al Congreso un proyecto para hacer cambios en las leyes Cerrojo y de Pago Soberano para intentar acordar con los holdouts una vez que venza la vigencia de la cláusula RUFO, a fin de año.
La decisión del Gobierno de acordar con los buitres se mantiene en reserva para cuidar el relato, pero el apuro tendría que ver, por una parte con la proximidad de las elecciones y la necesidad de tener una economía lo más limpia posible, y por otra parte, frenar las investigaciones que los grupos privados están realizando sobre la llamada “Ruta del Dinero K”.
La cuestión de fondo, en realidad, sería que esas investigaciones no son propiamente motorizadas por los Holdouts, sino por la propia CIA, y no tienen tanto que ver con cuidar intereses privados norteamericanos, sino con una visión estratégica regional.
En efecto, el Gobierno de Cristina Fernández ha trazado lazos con Rusia, China, mantiene acuerdos con Irán, y es el mejor partener de Venezuela, un Estado antiimperialista, todo lo cual desequilibra el cuadro de situación para el Departamento de Estado.
Redacción El Diario de Salta
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