Por: Daniel Salmoral
Y al igual que la nave, Miguel Isa va.
Siguiendo su instinto, el mismo que lo llevó de ser un vendedor callejero de fiambres a convertirse en una de las figuras más importantes de la política contemporánea de Salta, el Intendente avanza a paso vivo hacia su objetivo mediato que no es otro que el de ser el próximo gobernador de los salteños.
Haciendo oídos sordos a quienes le “aconsejan” que se quede en el municipio, a los que le ofrecen “arquitectos” para que le reconstruyan puentes, e ignorando a aquellos “compañeros” que con auténtico desprecio le muestran sonrisas de frente y le largan millones de maldiciones a sus espaldas, Isa va.
Convencido deque en diciembre de 2015 será el principal inquilino de los alfombrados despachos del Grand Bourg, el Intendente de Salta lanza, el penúltimo día de Octubre, su marcha hacia ese objetivo.
Obvio que para que eso ocurra, Isa deberá dejar atrás primero, en las PASO (Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias), a quien hoy gobierna la provincia y es a su vez el titular del Partido Justicialista, Juan Manuel Urtubey.
Para buena parte de los salteños, iba a ser prácticamente imposible que ambos dirigentes se enfrenten en elecciones internas, pero los pasos se aceleraron en los últimos días y dejan ver que, finalmente, la confrontación será inevitable a menos, dicen los coroneles isistas, que Urtubey desista de ir por un tercer mandato porque se va definitivamente a buscar su espacio en el orden nacional o porque comprenda que la mayoría de los salteños van a apostar por su jefe político, aún cuando Urtubey cuente, en teoría dicen, con el apoyo de la mayoría de los jefes comunales del interior provincial, del aparato del gobierno y de una dirigencia partidaria a la que consideran timorata y carente de simpatía por parte de los salteños de a pié.
Por eso es que el jueves 30 de Octubre, en el marco del “1er. Congreso de Dirigentes Políticos y Sociales de la Ciudad de Salta”, en el crepúsculo de Salta y en el Club San Martín, Miguel Isa saltará al cuadrilátero y quedará a la espera que Urtubey haga lo mismo.
Este encuentro, para el que toda la dirigencia que responde al Intendente capitalino está trabajando a destajo junto a la militancia barrial y social, ha provocado en el urtubeycismo, aunque ellos como es de suponer lo niegan, una enorme preocupación porque se dan cuenta que la sociedad política Urtubey-Isa llega a su fin y por eso las chances para que el actual gobernador vaya por un tercer mandato en la provincia, se comienzan a complicar en serio.
Es lógico que esto ocurra por cuanto aún cuando Urtubey le gane la interna a Isa, igual terminará perdiendo porque se quedará sin nadie que le traccione votos en el distrito electoral más importante de la provincia.
El razonamiento es simple.
Si Isa pierde con Urtubey, se va a su casa a esperar las elecciones del año 2017 o 2019 y en esta del 2015, será sólo un ciudadano más que observará, desde la platea la lucha que viene.
Si esto al final ocurre y con un adversario como Juan Carlos Romero, Urtubey no las tendrá a todas consigo.
“Nosotros estamos convencidos que Miguel (Isa) le gana las PASO a (Juan Manuel) Urtubey porque cuando caminamos los barrios, nos damos cuenta que la gente a la hora de decidir entre uno y otro elegirá a Miguel porque siente que es igual que ellos”, era el razonamiento de uno de los dirigentes que con mucho empeño trabaja en la organización del lanzamiento de la campaña isista.
Isa con esta jugada de alta política, demuestra que ha entendido que su tiempo es ahora y que es él quien debe protagonizarla para recuperar, según dicen sus incondicionales, las banderas de Roberto Romero que quedaron en un arcón y olvidadas, luego de la muerte del último caudillo que dio la historia política de Salta.
“Miguel es el legítimo heredero de Don Roberto (Romero) y esto la gente sencilla de la provincia lo percibe cada vez que tiene oportunidad de estrecharlo en un abrazo. Sabe transmitir sentimientos y además demostró que también gestiona ya que Salta, a pesar de ser una ciudad con problemas propios de una gran urbe, tiene una cara muy distinta a cuando llegó a la Intendencia hace diez años atrás”, era la explicación que acercaba uno de los funcionarios que lo acompaña de los tiempos cuando Isa tenía su despacho en los altos del Banco Hipotecario Nacional.
Urtubey, en tanto, sólo piensa en las elecciones generales del mes de Mayo del año que viene porque está seguro que será él y nadie más que él quien deba enfrentar, en representación del peronismo y del Frente que lo tiene como líder y conductor, a los rivales que se le pongan en frente.
Si bien él no lo dijo, pero si algunos de sus pocos funcionarios que hablan de política, Isa hará amagues, tomará aprestos como para ir a la guerra, pero al final no confrontará con quien reconoce como su jefe político.
“Miguelito (Isa) es un zorro de la política al que le gustan estas puestas en escena, pero no se enfrentará con Juan (Manuel Urtubey). No va a ir contra el viento porque sabe que Juan le gana ya que cuenta con el apoyo de la totalidad de los intendentes y del PJ, por lo que al final aceptará, como se lo piden muchos compañeros y dirigentes del Frente, que vaya por otro período en la Intendencia. Además, si te das una vuelta por el Centro Cívico Municipal, escucharás que muchos funcionarios, pero sobre todo los empleados de planta política, en reserva lógico, no apoyan esta idea de Isa porque saben que si pierde ellos serán los que pagarán el pato”, afirmaba un asesor del Gobernador.
Lo cierto es que por ahora la tarea que Isa le encomendó a su gente, es poner proa hacia las Lomas de Medeiro consciente que para ello deberá ganarle a un Urtubey que, en la teoría al menos, parecería correr con el caballo del comisario.
Un grupo de taxistas, en la parada y a la espera de pasajeros, comentaban que a Isa, a lo largo de su vida política, la suerte siempre lo acompañó y que éste es un factor a tener muy en cuenta a la hora de realizar predicciones sobre el futuro de los dirigentes.
El Intendente, Miguelito, “El Turco”, amado por sus seguidores y odiado por los U de paladar negro, dejando de lado estas consideraciones, sabe que deberá, como el salmón, nadar contra la corriente para llegar dónde quiere.
“Nunca le escapé a los desafíos y si estos son difíciles, mejor”, es una frase que repite en público y en privado.
Los días que vienen, como decía el protagonista de una popular serie televisiva de los años ’70, dirán que es lo que al final a Isa le depara el destino.
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